Módulo 2: Buenas prácticas desde la administración de la Xunta de Galicia.
Medidas positivas llevadas a cabo por la administración de la CCAA de
Galicia dirigidas a las mujeres del
medio rural y del sector marítimo pesquero de Galicia.
1.- Presentación:
A partir de los años 90 en Galicia se
experimenta un fuerte cambio en su legislación para paliar las desventajas de
las mujeres gallegas trabajadoras del rural y del sector marítimo pesquero.
Galicia se caracteriza por tener un importante
sector primario siendo una de las principales comunidades autónomas productoras
de carne, leche y productos de la pesca. Las mujeres representan un fuerte
activo de trabajo siendo las que se encargan entre otras muchas labores por
ejemplo del ordeño diario de los animales, alimentación y cuidados de los
mismos. No obstante los titulares de las explotaciones gallegas eran
prácticamente al cien por cien hombres. Esta nula representación de las mujeres
rurales gallegas suponía que trabajando durante años, llegaban a la jubilación
y no habían cotizado nada a la seguridad social.
Se vio que este trabajo de las
mujeres gallegas no estaba valorado, visibilizado y mucho menos remunerado.
A raíz de esto la administración gallega
promueve un fuerte impulso para contribuir a la incorporación de las mujeres
del medio rural y pesquero como titulares de las explotaciones intentando
igualar por lo tanto la representación de ambos sexos.
2.- Ámbito de actuación:
Para paliar la ínfima representación
femenina al frente de las explotaciones gallegas, la Xunta de Galicia promueve
una línea de ayudas donde la cuantía económica en el caso de incorporarse una
mujer es mayor que en el caso de un hombre. Esta diferencia no debe considerarse
una discriminación hacia el sexo masculino, sino una medida de acción positiva
que se mantendrá hasta conseguirse los criterios de igualdad. Quiere esto decir
por lo tanto que en el momento que la CCAA de Galicia registre datos que
muestren que no hay desigualdades, se eliminaría esta diferencia.
3.- Impacto en Galicia con esta
medida:
La proyección de las mujeres como
titulares de las explotaciones agroganaderas
ha permitido profesionalizar su actividad ya que parejo a esta titularidad han
podido acceder a cursos de formación los cuales son obligatorios para poder
percibir las ayudas. Por otra parte se ha conseguido visibilizar el trabajo de
la mujer gallega y se ha conseguido fomentar la igualdad y mejorar su calidad
de vida así como ayudar al asentamiento de la población rural, ya que muchas
mujeres jóvenes gracias a este impulso apuestan por el rural, no solo las que han heredando
granjas de sus padres, abuelos que de otra forma perderían la continuidad sino
también iniciando nuevos proyectos pioneros que han supuesto un incremento
sustancial de la economía gallega.
Con objeto de reflejar esta
titularidad y sus variaciones se crea el Registro gallego de Explotaciones Agrarias
donde podemos ver que mientras en el año 2015 Galicia contaba con 170
explotaciones en el 2021 cuenta con 935 lideradas por mujeres.
4.- Puntos fuertes y debilidades:
Con esta medida se consigue que las
mujeres rurales gallegas al igual que participan en las tareas agrarias y
pesqueras participen también en igualdad de condiciones en los derechos y
obligaciones que les corresponden. De esta forma se ha conseguido que muchas
mujeres puedan estar de alta en la Seguridad Social.
Como punto débil destacar que las
explotaciones beneficiarias deben permanecer al menos cinco años en activo, y
en muchos casos pasados estos años y después de recibir la ayuda económica y la
formación proceden al cierre de la explotación. Considero que deberían gestionar
las condiciones de otra forma para evitar estos cierres, como por ejemplo, si
no existe una causa muy justificada, como puede ser el caso de explotaciones
pequeñas familiares que por su pequeño tamaño no puedan asumir gastos y
competir en el mercado, se devuelva sino toda, parte de la ayuda recibida.
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